lunes, 6 de febrero de 2012

Te echaba de menos.


Tu mirada. Tu sonrisa. Tu forma de hablar. Tus gestos. Tu pelo. Tu rostro. Tus pecas. Tu nariz. Tus ojos. Tus labios. Tus besos. Tu cuerpo. La forma en la que me decías te quiero. La forma en la que, con solo una mirada, nos entendíamos perfectamente. No hacían falta palabras. 

Te bajaste del tren, pisaste la ciudad que hacía años había sido tu hogar.
Sonreíste al verme a lo lejos.

Sabíamos que ya nada iba a separarnos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario